Las organizaciones están adoptando rápidamente prácticas DevOps para permitir una entrega más rápida de valor al cliente y agilidad a escala. Sin embargo, la seguridad se ha visto a menudo como un problema que hay que solucionar más tarde y no como un requisito que hay que tener en cuenta en el proceso, lo que dificulta garantizar que la infraestructura y los entornos cumplan los requisitos normativos y de seguridad sin sacrificar la velocidad.
Se prevé que para 2027, las prácticas DevSecOps estarán integradas en el 85% de los equipos de desarrollo de productos, frente al 30% en 2022.
- Permitir el cambio cultural haciendo de la seguridad una responsabilidad compartida
- Transformar las filosofías de seguridad implementando prácticas de seguridad, como el shift-left.
- Aprovechar las herramientas de automatización para reducir la fricción de los desarrolladores con la seguridad.